Toxicidad

Nada se enseña en la escuela  sobre cómo no ser un novio o novia de mierda. Claro, nos enseñan la biología del sexo, la legalidad del matrimonio, y tal vez leemos algunas oscuras historias de amor del siglo XIX sobre cómo no ser.

Pero cuando se trata de manejar realmente el meollo de las relaciones, no se nos dan indicaciones ... o peor, se nos dan columnas de consejos en las revistas o en las redes sociales.

Sí, es un prueba y error desde el principio. Y si eres como la mayoría de las personas, ha sido mayormente un error, y añadiría doloroso.

Pero parte del problema es que muchos hábitos de las relaciones poco saludables se incorporan a nuestra cultura de una manera natural. Adoramos el amor romántico, ya sabes, ese mareo e irracional amor romántico que de alguna manera encuentra rompiendo platos de porcelana en la pared en un arranque de lágrimas un tanto entrañable, y se burla de la practicidad o las sexualidades no convencionales. Hombres y mujeres son criados para objetivarse mutuamente y para objetivar sus relaciones. Por lo tanto, nuestros socios a menudo son vistos como activos en lugar de alguien para compartir apoyo emocional mutuo.

Mucha de la literatura de autoayuda que hay por ahí tampoco es útil y para la mayoría de nosotros, mamá y papá seguramente tampoco fueron los mejores ejemplos en este campo.

Afortunadamente, se han realizado muchas investigaciones psicológicas sobre relaciones sanas y felices en las últimas décadas y hay algunos principios generales que siguen apareciendo constantemente y que la mayoría de las personas desconocen o no siguen. De hecho, algunos de estos principios en realidad van en contra de lo que tradicionalmente se considera "romántico" o normal en una relación.

A continuación se presentan seis de las tendencias más comunes en las relaciones que muchas parejas creen que son saludables y normales, pero en realidad son tóxicas y destruyen todo lo que apreciamos. Preparad los pañuelos.

1. El pasado pesa.

Cuando alguien con quien estás saliendo sigue culpándote por errores pasados ​​que hiciste en la relación, o incluso anteriores. Si las dos personas en la relación hacen esto, se convierte en lo que yo llamo "la tarjeta de puntuación de la relación", donde se convierte en una batalla para ver quién ha cometido más errores en los últimos meses o años, y por lo tanto, quién le debe más al otro.

Fuiste un imbécil en la fiesta de cumpleaños número 12 de mi prima en 2012 y desde entonces ha arruinado tu vida. ¿Por qué? Porque no pasa una semana sin que te lo recuerden. Pero eso está bien, porque esa vez que la sorprendiste enviándole mensajes de texto íntimos a su compañero de trabajo, inmediatamente te quita el derecho a ponerte celoso, por lo que es un poco parejo, ¿verdad?

Incorrecto!

Por qué es tóxico: El cuadro de mando de la relación se desarrolla con el tiempo porque una o ambas personas en una relación utilizan las malas acciones del pasado para intentar justificar la justicia (o errores añadiría yo) del momento actual. No solo estás desviando el problema actual en sí mismo, sino que estás despertando la culpa y la amargura del pasado para manipular a tu pareja para que se sienta mal en el presente.

Si esto dura lo suficiente, ambos socios gastarán la mayor parte de su energía tratando de demostrar que son menos culpables que el otro, en lugar de resolver el problema actual. Las personas pasan todo su tiempo tratando de estar menos equivocadas la una con la otra en lugar de ser más correctas la una con la otra.

Lo que deben hacer en su lugar: tratar los problemas individualmente. Si alguien engaña habitualmente, entonces obviamente es un problema recurrente. Pero el hecho de que te haya avergonzado en 2012 y que ahora se haya entristecido no tiene nada que ver el uno con el otro, por lo que ni lo menciones.

Debes reconocer que al elegir estar con tu pareja, está eligiendo estar con todas sus acciones y comportamientos previos. Si algo te molestó tanto hace un año, deberías haberlo tratado hace un año.


2. Lanzando “pistas” y otras agresiones pasivas.

En lugar de expresar un deseo o pensamiento abiertamente, tu pareja intenta empujarte en la dirección correcta para que lo descubras tu mismo/a. En lugar de decir lo que realmente te está molestando, encuentras formas pequeñas e insignificantes de molestar a tu pareja para que te sientas justificado a la hora de quejarte.

Por qué es tóxico: porque muestra que vosotros dos no se sienten cómodos comunicándose abiertamente y claramente entre vosotros. Una persona no tiene ninguna razón para ser pasiva agresiva si se siente segura expresando su inseguridad dentro de la relación. Una persona nunca sentirá la necesidad de dejar caer "pistas" si siente que no será juzgada o criticada por ello.

Lo que deben hacer en su lugar: expon tus sentimientos y deseos abiertamente. Y deja en claro que la otra persona no es necesariamente responsable u obligada a ellos, pero que te encantaría contar con su apoyo. Si te aman, casi siempre te lo darán.


3. Mantener a la relación como rehén con Ultimátums.

Cuando una persona tiene una simple crítica o queja y chantajea a la otra persona amenazando el compromiso de la relación como un todo. Por ejemplo, si alguien siente que has sido fría con él, o viceversa, en lugar de decir: "Siento que estás siendo frío a veces", dirán: "No puedo salir con alguien que sea frío para mí todo el tiempo".

Por qué es tóxico: es un chantaje emocional y crea toneladas de drama innecesario.  Es crucial para ambas personas en una relación saber que los pensamientos y sentimientos negativos pueden comunicarse entre sí sin peligro, sin que ello amenace la relación en sí. De lo contrario, las personas suprimirán sus verdaderos pensamientos y sentimientos, lo que conduce a un ambiente de desconfianza, manipulación y chantaje continuo.

Está bien molestarse con tu pareja o no gustarte algo sobre ellos. Eso se llama ser un ser humano normal. Pero entiende que comprometerse con una persona y siempre gustarle no es lo mismo. Uno puede estar comprometido con alguien y no gustarte todo acerca de ellos. Uno puede dedicarse eternamente a alguien, pero a veces, asi y todo, tu pareja puede enojarse. Por el contrario, dos socios que son capaces de comunicar comentarios y críticas entre ellos, solo sin juicio ni chantaje, fortalecerán su compromiso mutuo a largo plazo.


4. Culpar a tu pareja por tus propias emociones.

Digamos que estás teniendo un mal día y que tu pareja no es exactamente muy simpática o de apoyo en este momento. Has estado en el teléfono todo el día con algunas personas por trabajo. Se distrajo cuando la abrazaste. Quieres descansar en casa juntos y simplemente ver una película esta noche, pero tiene planes de salir a ver a sus amigas.

Así que arremetes contra ella por ser tan insensibles hacia ti. Has estado teniendo un día de mierda y no ha hecho nada al respecto. Claro, nunca lo preguntaste, pero debería saberlo para que te sientas mejor. Debería haber adivinado lo que realmente sentías en ese momento.

Culpar a nuestras parejas por nuestras emociones es una forma sutil de egoísmo y un ejemplo clásico del mantenimiento deficiente de los límites personales. Cuando estableces un precedente del que tu pareja es responsable de cómo te sientes en todo momento (y viceversa), desarrollarás tendencias codependientes. De repente, no se les permite planificar actividades sin consultar contigo primero. Todas las actividades en el hogar, incluso las sencillas como leer libros o mirar la televisión, deben ser negociadas y comprometidas. Cuando alguien comienza a enojarse, todos los deseos personales salen por la ventana porque ahora es tu responsabilidad hacer que los demás se sientan mejor.

El mayor problema de desarrollar estas tendencias codependientes es que generan resentimiento. Claro, si mi pareja se enoja conmigo de vez en cuando porque tuvo un mal día y está frustrada y necesita atención, eso es comprensible. Pero si se convierte en una expectativa de que mi vida gira en torno a su bienestar emocional en todo momento, pronto me volveré muy amargada e incluso manipuladora hacia sus sentimientos y deseos.

Asume la responsabilidad de tus propias emociones y espere que tu pareja sea responsable de las suyas. Hay una diferencia sutil pero importante entre apoyar a tu pareja y estar obligado a tu pareja. Cualquier sacrificio debe hacerse como una opción autónoma y no ser visto como una expectativa. Tan pronto como ambas personas en una relación se vuelven culpables por los estados de ánimo y las recesiones de los demás, esto les brinda incentivos para ocultar sus verdaderos sentimientos y manipularse entre ellos.

El mejor regalo que puedes dar a alguien es tu propio desarrollo personal.


5. Muestras de celos "amorosos".

Enojarse cuando tu pareja habla, toca, llama, envía mensajes de texto, se cuelga o estornuda en la vecindad general de otra persona y luego procede a eliminar esa ira de tu pareja e intenta controlar tu comportamiento. Esto a menudo conduce a comportamientos insanos como piratear la cuenta de correo electrónico de tu compañero, revisar sus mensajes de texto mientras se baña o incluso seguirlos por la ciudad y aparecer sin avisar cuando no lo están esperando.

Me sorprende que algunas personas lo describan como una especie de muestra de afecto. Se imaginan que si su pareja no estuviera celosa, entonces eso significaría que ellos no los querían.

Esto es absolutamente una locura para mí. Es controlador y manipulador. Se crea un drama innecesario. Transmite un mensaje de falta de confianza en la otra persona. Y para ser honesto, es degradante. Si mi pareja no puede confiar en mí para estar cerca de otras personas atractivas, eso implica que ella cree que soy a) mentirosa o b) incapaz de controlar mis impulsos. En cualquier caso, esa es una persona con la que no quiero estar saliendo.

Lo que debes hacer en su lugar: Confía en tu pareja. Es una idea radical, lo sé. Algunos celos son naturales. Pero los celos excesivos y las conductas de control hacia su pareja son signos de sus propios sentimientos de indignidad y usted debe aprender a lidiar con ellos y no forzarlos sobre aquellos que están cerca de usted. Porque de lo contrario, solo vas a alejar a esa persona. Quizás para siempre.


6. Comprando las soluciones a los problemas de la pareja.

El dedo medio de una mujer con un anillo de diamante en él. ¿Lo ves?: Cada vez que surge un conflicto o problema importante en la relación, en lugar de resolverlo, uno lo cubre con la emoción y los buenos sentimientos que conlleva comprar algo agradable o seguir adelante. Un viaje a algún lugar. Un buén regalo

He visto varias parejas en este caso, acabándo divorciadas. Me han dicho independientemente que este era el problema principal en su matrimonio: encubrir continuamente sus problemas reales con placeres superficiales.

¿Por qué es tóxico?  no solo no soluciona el problema real debajo de la alfombra (donde siempre volverá a emerger e incluso peor la próxima vez), sino que establece un precedente poco saludable dentro de la relación. Este no es un problema específico de género, pero usaré la situación tradicional de género como ejemplo. Imaginemos que cada vez que una mujer se enoja con su pareja, el hombre "resuelve" el problema comprando algo agradable a la mujer, o llevándola a un buen restaurante o algo así. Esto no solo le da a la mujer un incentivo inconsciente para encontrar más razones para estar enojada con el hombre, sino que también no le da al hombre absolutamente ningún incentivo para ser responsable de los problemas en la relación. Entonces, ¿con qué terminas? Un esposo retirado que se siente como un cajero automático, y una mujer incesantemente amargada que se siente desconocida.

Lo que debes hacer en su lugar: En realidad, ya sabes, lidiar con el problema. ¿La confianza se rompió? Habla acerca de lo que se necesita para reconstruirlo. ¿Alguien se siente ignorado o despreciado? Habla sobre las formas de restaurar esos sentimientos de aprecio. ¡Comunicación!

¿Lo habré dicho alguna vez?

No hay nada de malo en hacer cosas buenas para un otro significativo después de una lucha para mostrar solidaridad y reafirmar el compromiso. Pero uno nunca debe usar regalos o cosas extravagantes para tratar con los problemas emocionales subyacentes. Los regalos y los viajes se llaman lujos por una razón, solo puedes apreciarlos cuando todo lo demás ya es bueno. Si los usas para encubrir tus problemas, entonces te encontrarás con un problema mucho más grande en el futuro.

Tenlo por seguro.